De payasos,circo y la gaviota.

Resulta que el Lunes pasado, mi buena amiga Truza, me compró un boleto para ir al circo, boleto que era utilizable toda la semana, decidimos ir el Domingo, pero como ése día celebrarémos el onomástico sensacional de su madre, encontramos como solución ir el pasado Viernes.

Fue una experiencia graciosa, extraña y un tanto chusca, primero que nada está aclarar que desde hace varios años le he temido a los payasos, ¿Por qué?, no sé, pero me daban miedo.

Entramos al circo, traté de abrir mis narinas para percibir el peculiar aroma de circo, esa esencia a palomitas, excremento de animales y naco, si, lo llegue a oler, me gustó poder olerlo, todo pude percibir menos el excremento de animal, dado a que era New York on ice, y era un show de puras personas. Como siempre el primero en salir fue el payaso, en un principio me entró un miedo indescriptible a lo obscuro, sentía que de un derepente me iba a aparecer un payaso atrás(nunca sucedió), los payasos dieron su rutina que terminó siendo un tanto graciosa, luego salieron unas muchachitas disfrazadas de " mariposas", algo que me me llamó la atención es que a una de éstas jovencitas casí se le salía el monte de venus, me espantó la idea de ver algo así, pero gracias a que su traje estaba bien confeccionado no pasó nada.

Después de ver chicas dar vueltas, ver personajes de la película de disney madagascar danzar, después de que tarzan y jane volaron por toda la carpa, volvió a salir el payaso, esta vez acompañado de un más gracioso payaso, su rutina iba bien, hasta que algo se fue mal, un payaso le tiró la peluca al otro( no era parte del show, dijo uno de ellos), después de volver a colocar su peluca, siguió con su teatro, sacó de un balde una esponja con traje, a la que nombro, bob esponja, el otro payaso, la partió a la mitad, cuando ésto sucedió el payasoo gritó: - ¡¡Gaaviootaaa!!, a todos les pareció sumamente gracioso, a mi también, por que de alguna extraña manera se que hablan de una telenovela.

El show terminó por ahí de las 10, salímos y tomamos un taxi libre, el taxista iba escuchando el juego de los padres, juego que por cierto ganaron, siempre he querido ir a ver un juego de los padres, pero éso no tiene nada que ver con el circo, así que mejor ya no digo nada.