Que bueno es ser asi.

Vario tiempo sin escribir.
Es éste mi blog, y son ustedes mis lectores, (Soleil se pregunta: ¿Cuáles lectores?.)

Mi felicidad fue ligeramente permanente, duró mas de una semana, eso si, el sentimiento de que pasó y no me dí cuenta sigue vagando en mis recuerdos.

Algunos me preguntan ¿Qué sucedió?, y yo respondo diferente historias fantásticas, creo que después de todo inventar un poco no daña la integridad de nadie ( ¿o si?).

En fin, lo que sucedió es algo común cada fin de año, fiestas, si, navidad y todas esas festividades con puro significado lucrativo.

De acuerdo, estamos ubicados en el tiempo, más no en el espacio,me dice una vosecilla.
¡Vaya que eres exigente!, le respondo, todo a su tiempo, haces que pierda el hilo de la historia.

Ah si, decía que fue entre navidad y año nuevo( festividades que no son de mi completo agrado,pero existen y ¿Qué se le puede hacer?), estaba yo como casí siempre en mi casa, descansando el descanso, asi como lo escuchas o lees, el hecho es que descansaba. Recuerdo que había despertado bastante tarde ése día, todos estaban hipnotizados ante un sujeto pequeño, le llamaban "bebé". Yo como siempre me rascaba la cabeza y veía tele, cuando llegó mi padre, el pulpo.

-¿Tú padre es un pulpo?- Ehmmm, no, pero ¿Apoco no sería divertido?, bueno, déjame seguir con mi historia.

Mi padre, que no es un pulpo, me quita el control de la tele-visión(si, si tele-visión)(homo videns trauma), y se dispone a cambiarle, yo a rastras, pataleo y grito, pero no es suficiente, a el no le importa que a mi me guste ver miami inc.

Me voy indignada y tomó un poco de agua de jamaica. - Y todo esto que tiene que ver con tu felicidad casi quincenal-. A eso voy deja de interrumpirme por favor.

Como decía, el agua que me tomé estaba un poco rancia, pero tenía sed, asi que no me importó, además no quería escupir sobre mis pijamas favoritas.

De un derrepente, alguien gritó mi nombre, Sooleeeiil, primero me asusté un poco, pero luego salí y eran 2 sujetos de sexo dudoso, algo que me pareció curioso es que los conosco, y son mis amigos.

Grite: Ya voy!

Me arreglé tan rápido como pudé, con las ropas que estaban tiradas en el suelo de mi cuarto y salí con todo y bolso, los dos sujetos me esperaban con una expresión extraña en la cara.
Yo entregué un regalo un poco común en mí, algo así como un sombrero, pero de naturaleza, animal.
Ellos solo venían por que "estaban en el centro", así que no traían lo que era mío, pero yo entregue parte de lo que habíamos acordado.

Platicamos de cosas que son tan efímeras como un vagabundo en la calle primera, hasta que uno de los sujetos,tuvo que retirarse, nos despidimos y terminó mi historia.

-¿Es todo?

- Si, es todo.

-¿Entonces, que fue lo que te hizo feliz?

- La sorpresa.