Muchas veces me pregunté si llegaría el momento
en el que me iban a dejar de importar ciertas cosas,
pues déjame decirte que si.
Me dejé dejarme de importar.
Ya no es importante:
El color de las lechugas.
El temor ala obscuridad.
La comezón en los pies.
El no tener con quien bailar.
Usar muletillas.
Que no entiendan lo que dices.
No entender lo que dicen.
Pisar el suelo descalza.
Desear vivir un poco más.
Dormir acompañada.
Soñar estupideces.
Brindar por la risa.
Resvalarte en el lodo.
Que te oigan cantar.
Que te vean fallar.
No aceptar que te equivocas.
Ver como te sonrojas.
Lo eterno estudiar.
Por el mundo volar.
Listas interminables realizar.
TODO ÉSO YA NO ME CAUSA PROBLEMAS.
domingo, febrero 08, 2009
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2 comentarios:
Ojalá pudiera pensar lo mismo...
Cierto, hay cosas que ya no me importan como antes... hare mi lista mental :)
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