Autoretrato.

Cambia de humor por las noches, y más cuando no tiene que hacer.

Odia sudar, odiar, y decir que no odia.

Prefiere lo simple, pero se complica.

Le gusta leer y se siente bien después de terminar un libro.



Observa, siempre.



Se ridiculiza sin darse cuenta, después rie de ello.
Cruzar sonrisas con extraños es un pasatiempo de sus favoritos.

Dice que no llora.


Busca, continuamente, sin terminar.
Rie, de verdad rie, comé a sus horas, y disfruta de un dulce después de comer.

Le encantan las palabras rebuscadas, pero utilizarlas es un NO definitivo.
Canta y baila cuando piensa que nadie la ve.

Inventa, se reinventa, busca emociones y situaciones para tener algo de que hablar.
Vive de lo nuevo, se inspira con lo viejo, se alimenta de recuerdos vagos.

A veces pretende que no le importan las cosas, por que así es más fácil.
Camina con zapatos cómodos, corre cuando necesario.

Ve hacia ambos lados antes de cruzar una calle, incluso si esta desierta.
Detesta que extraños camines atrás de ella, se siente perseguida.

Manifesta disgusto sólo ante ella misma, no habla, grita.
Puede ser paciente, si así lo decea.

Puede relatarte miles de historias de ella, pero como ésta siempre tienen un fin.