Sigo riendo, después de 35 grados,

el día de hoy hasta frío tengo.

Sigo riendo, no sé de que, ni como río, pero continuo.

Busco la salida de ésta cruel mentira,

me he creado una realidad absurda,

me embrutesco respirando el último suspiro que dejaste.

Sigo riendo, no me he ido, estoy renovando calamidades,

funciono, quien sabe como.

Y si es que no riéra el mundo me tragaría, entre escombros seguería,

tu sonrisa me quemaría, pero río, de verdad, sin más.

yo y la araña

Hay una araña en mi pared turquesa, no sé si matarla o dejar vivir y que me pique.

Los últimos días han expectativa, he estado esperando no encontrar.

Nuca había notado que las arañas pueden caminar hacia atrás,

supongo que yo también lo hago, quizás por que el pasado me trae mejores emociones.

Se detuvo, sus patas múltiples vibran, como sin saber a donde ir.

Yo tampoco tengo idea de lo que quiero.

Camina un poco hacia adelante, parece estar añorando algo.

Creo que si busco, quiero y necesito algo más.

Permanece quieta de nuevo, igual que yo, por que me voy a dormir.

mi blog dice:

Que casi no he escrito en 2010.

Que necesito un cambio de cerebro.

Que repito palabras.

Que hablo demás.

Que soy como soy.

Que no escribo suficiente.

Tiempo de seguir

Manejo en la madrugada, el camino esta callado,

las luces tenues, frías, me dicen que te estoy buscando.

Empieza la triste cancioncilla que solías cantarme,

todo parece ser más casualidad.

Sigo moviéndome, observo como las llantas del carro mi hermana se detienen frente a su casa.

No logro sacar los pies a su banqueta, tengo miedo, parece que cocodrilos invaden su entrada.

Continuo al acecho, la noche de hoy tenías que ser mi presa,

te dejé escapar, como todo, te deje fluir, pasar al siguiente nivel.

Es tiempo de seguir, me dije por fin en voz alta.